Hoy
Hoy me permití caminar un rato antes de todas mis obligaciones, respirar un aire más limpio y escuchar el ruidoso silencio de la ciudad, de palpar poco a poco su despertar y de sentir como van llegando y amaneciendo los colores, los olores y sus palabras, ver y descifrar en el gesto, la mirada y la expresión en la cara de cada persona que me encuentro; su interés, su felicidad, su preocupación, su angustia, su día, y me veo en cada una de ellas, en cada momento que vivo, en cada tropiezo que tengo y en cada logro que consigo, y entre todas una, la mía, que expongo todos los días ante mis propias circunstancias, solo espero tener siempre la misma fuerza y constancia de continuar y de creer que solo así se triunfa, y que estaré siempre atento a cualquier oportunidad que se me presente. El camino hoy de todos es siempre el mismo y en el mío se me aparece un niño rezando un padre nuestro y logro ver en su rostro, el mejor regalo de este día; la fe, la alegría, el entusiasmo, el amo